CONCOVI asiste al Círculo Inmobiliario
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Opinión del presidente: Julio 2019

¡¡Sin ninguna duda “la persona”!!

El pasado 8 de julio, tuve el honor de asistir como conferenciante a una de las Asociaciones Profesionales y Culturales que yo más respeto, el “Círculo Inmobiliario”.

Yo, que llevaba muchos años conociendo y admirando la trayectoria e influencia de este selecto Grupo de Profesionales y de Ejemplares Personas, me veía, a un día de cumplir 50 años, frente a un numeroso público expectante escuchando cómo su Presidente, D. Ángel Moreno Olivares, leía mi modesto curriculum ante tan exigente auditorio.

Tras esta breve presentación y habiendo degustado una excelente comida, daba comienzo mi intervención, como siempre improvisada, de no más de media hora. Interrumpiendo el efímero silencio posterior, sólo escuché un agradecido y quiero creerme el sincero aplauso de todas aquellas personas que estoicamente soportaron una charla sobre algo a lo que titulé “El impacto de la Economía Social en el Sector Inmobiliario”.

Tras contestar a varias preguntas, todas ellas buscando explicaciones y aclaraciones, pero con exquisito gusto escogidas, sorprendentemente me nombraron Socio de Honor del Círculo Inmobiliario, con la entrega de un precioso y pesado galardón que llevaba inscrito y grabado mi nombre y la fecha de este inolvidable momento para mí.

La responsable de Prensa de CONCOVI, la señorita Raquel Pérez, que me acompañaba, me recordaba al término de este encuentro, que tenía que hacerle llegar esta Columna para la edición del número de Julio de mi revista sectorial favorita Metros2, a lo que le contesté de inmediato que se la haría llegar recogiendo mis impresiones y sensaciones de esta experiencia.

La reflexión que quiero intentar recoger en esta Columna no es fácil para mí, ya que todavía sigo dándole vueltas a la cabeza sobre su resolución. Veréis, se trata de un pensamiento contradictorio que me invadió en el taxi que me regresaba al despacho de la Confederación cuando al leer la base de este galardón, pude comprobar que sólo recogía mi nombre completo, sin aludir al cargo que ostento en CONCOVI.

Es curioso, pero por un momento, pensé inocentemente que quizás invitaron a la persona y no al Presidente…, puede que a los dos.

En todo caso, quiero que se sepa, que nunca, en ninguna de mis largas o cortas intervenciones, he preparado un solo discurso, en ninguno de tantos y tantos actos públicos en los que “el cargo” me ha dado la oportunidad de expresarme. No sé, si los amables y formados miembros del Círculo Inmobiliario invitaron al Presidente, creo que así debió ser, pero lo que sí puedo garantizarles es que, quien les habló e intentó transmitir el espíritu cooperativo y colaborativo fue sin ninguna duda “la persona”.