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“detrás de una “empresa” hay una “persona””.

Hoy quiero, a través de esta modesta Columna de Opinión, rendir un pequeño homenaje y presentar todos mis respetos a varias empresas y oficios del Sector de la Construcción que en estos últimos meses me han dado una lección de honestidad, haciéndome reflexionar sobre algo tan necesario, pero también tan escaso, como el código ético y la profesionalidad.

A veces, demasiadas, se nos olvida que detrás de una “empresa” hay una “persona”. Una persona igual que nosotros, con las mismas inquietudes, necesidades e ilusiones también.

Las formas son importantes y el modo o respeto que le mostremos al trabajador, oficio o proveedor con el que nos embarquemos en un proyecto, puede ser la diferencia entre el éxito y el fracaso de este.

Mis hermanos y yo nos criamos con una frase que mi padre utilizaba para casi todo; “honestidad por principios” , decía que, era válida la oyera quien la oyera, y que debía ser nuestra divisa en todos los escenarios y ámbitos de la vida, el cotidiano, familiar, amistoso, pero sobre todo en el profesional. Nos insistía en que, si lo aplicábamos sin distinción, ni calculo de renta, los beneficios, los retornos, la recompensa, siempre, siempre llegaría.

Con los años, he sabido y comprobado la razón que tenía.

Cuando a una persona, la tratas con honestidad, es muy difícil no ser correspondido.

Hace unos meses, tuve que contactar con un largo listado de empresas instaladoras, fabricantes y oficios que, en su calidad de proveedores de obra, trabajaban en la construcción de varias decenas de viviendas autopromovidas por una Cooperativa en el centro de Madrid.

No merece la pena entrar en los detalles, pero sólo os diré que todo ellos, habían ralentizado e incluso abandonado sus deberes, a causa de los problemas y desencuentros que mantenían con la contrata principal.

La obra sufría unos cuantiosos y costosos retrasos y los cooperativistas que habían cumplido rigurosamente con sus obligaciones, no podían acceder a sus viviendas que tanto sacrificio les había costado impulsar.

Pude comprobar que, aunque también lo había, el principal problema entre la constructora y estas empresas no era el económico, sino el de un trato repleto de faltas de respeto, ausencia de transparencia y sinceridad con el que estaban siendo considerados.

La Cooperativa y su equipo de asesores decidieron intervenir contactando con estos proveedores. Asumí personalmente la tarea de reunirme con cada uno de ellos, teniendo la oportunidad de conocer así a las personas que, detrás de estas siglas, conducían estas empresas.

Algunas de ellas, eran grandes firmas, pero la mayoría a las que me referiré, eran empresas familiares de mediano o reducido tamaño, si ello se mide por la facturación o volumen de negocio anual.

Yo, después de cada entrevista, tras saber la verdad y los motivos que causaron estos retrasos, creo de corazón que todas estas empresas, son Grandes Empresas, no por su cuenta de resultado, sino por las grandes y maravillosas personas que tuve la suerte de conocer. Son profesionales comprometidos y formados desde el código ético que aprendieron de sus mayores y, sobre todo, son personas y empresas que buscan un trato sincero, igual y respetuoso.

Compartimos en aquellas sesiones, toda la verdad, y sólo por ello, supe emocionado que, al día siguiente, reanudaron los trabajos pendientes de ejecutar, se repasaron y cumplieron los requerimientos técnicos y los cooperativistas hoy, por fin, han podido acceder a sus viviendas.

Por ello, esta columna se la dedico a estas personas y miles que, como ellos, gobiernan un barco en medio de una gran tempestad, salvando y enfrentándose año tras año a las inclemencias y reto de sobrevivir y competir en un mercado que, si su faro iluminara las buenas formas, la educación, el respeto igualitario y la “honestidad” seguramente su travesía acompañada de otras embarcaciones resultaría mucho más segura y eficaz, pudiendo incluso, por qué no, atracar y llegar al final del pasaje abarloado a otro compañero.

Gracias; Inst. Electricas Nadalux, Cerrajerías Hnos. Bautista, Jardinerías Yerba, Piscinas Xervicon, Clima Pull Energy, Limpiezas Muneris, Carpinterias Nieto, Cristalerias Ibérica, Construcciones Piandgi, Construcciones Larnovi-mancha.